jueves, 14 de febrero de 2008

sanidad y politica (con minúsculas)

En una espiral imparable la política se ha apropiado de la sanidad. No, he cometido al menos dos errores imperdonables en tan pocas palabras, he puesto política donde tenía que haber puesto casta política y he escrito sanidad donde debería de figurar salud, o mas exactamente muertos.

Ahora parece ser que la muerte tiene carnet de partido y que hay como mínimo dos muertes, una pro PSOE y otra pro PP. ¿Increíble?, a mi también me lo parece, me lo parecía, pero tras las noticias del tristemente famoso affair del Severo Ochoa no me queda más remedio que llegar a esa conclusión.

A raíz de una sentencia, como si hubieran sido unas elecciones, unos dicen que se ha demostrado la manipulación de los otros y los otros que la sentencia no contempla el problema real ni se manifiesta sobre el como, tal como pretenden los unos.

La única conclusión es que todos mienten, o por ser un poco más suave, ninguno cuenta más que la parte de verdad que le interesa. ¿Y los pacientes? Los hay de tres clases, los que creen a unos y los van a votar, los que creen a otros y los van a votar y esos que no importan a nadie. ¿Y los muertos? Solo importan si nos dan la razón porque ya no votan. ¿Y la prensa? Apoyando incondicionalmente al partido que a cada uno le corresponde, con un par. A estos les importa la tirada. Claro que así viven, de las promociones

Así que la próxima vez que tenga usted la desgracia de tener que acudir a la sanidad pública pídale al médico, aparte del diploma acreditativo, el carnet del partido, si al final no está satisfecho llame inmediatamente a la sede local del partido contrario y CURESE EN SALUD avisando de que cree que el Dr. tal es sospechoso de cometer errores que ponen en peligro la salud de sus pacientes. Comprobará que

Siempre aparecerá una estadística que le de la razón
Siempre habrá un partido que le de la razón
Siempre habrá alguna asociación o grupo organizado que le de la razón
Siempre habrá un grupo de gilipollas que sin saber de que va la cosa le den la razón

Al fin y al cabo a lo mejor Vd. tenía razón o no, pero la acaba teniendo, o tampoco, pero piense que tener razón en esta sociedad cada vez importa menos, lo importante es que te la den, o en definitiva que no te den... que desgraciadamente te acaban dando por todos los lados.

1 comentario:

Mariar dijo...

EL GRITO
Estremecido, ululante,
salió de la garganta el grito
y retumbante.
Fue a su paso derribando
montañas.
Fue a su paso arrasando
prados.
Fue a su paso secando
ríos.
Por un dolor infinito,
el grito,
y al chocar con un papel
quedó escrito.